Con una presencia mundial y un equipo diverso que supera los 700,000 empleados en más de 120 países, Accenture se ha establecido como líder en consultoría y servicios tecnológicos. No obstante, aparte de sus innovaciones en soluciones digitales, uno de los pilares fundamentales de su reputación es el enfoque meticuloso y proactivo en diversidad e inclusión (D&I) dentro de sus políticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE). Este compromiso no solo moldea su cultura organizacional, sino que también se materializa en impactos sociales reales y es visto como un motor esencial para su crecimiento y resiliencia empresarial.
Definición y marco estratégico de D&I en Accenture
Para Accenture, la diversidad e inclusión va más allá de la mera presencia de distintos grupos étnicos, culturales, de género o habilidades. Se enfoca en una estrategia completa que promueve un ambiente de trabajo donde todos puedan aportar su individualidad, impulsar la creatividad e identificar las demandas del mercado global contemporáneo. En el ámbito de la RSE, estos principios se gestionan con metas definidas y evaluables:
- Equilibrio de género: Accenture se planteó tener igual número de hombres y mujeres empleados para 2025; en 2023 ya había superado el 47% de presencia femenina.
- Inclusión LGBTI+: la organización incorpora redes de afinidad, capacitación en diversidad y beneficios específicos para empleados LGBTI+, incluyendo seguros y asistencia médica para parejas del mismo sexo en la mayoría de sus oficinas.
- Iniciativas para múltiples generaciones: los equipos fomentan el aprendizaje intergeneracional y programas de mentoría inversa donde los jóvenes talentos asesoran a los líderes experimentados.
- Programas para personas con discapacidad: se invierte en accesibilidad tanto digital como física, formación para gerentes y campañas de concienciación interna, siendo reconocidos por índices como el Disability Equality Index.
- Ética en la contratación de minorías: se establecen objetivos de diversidad étnica, especialmente en lugares como Estados Unidos y Brasil, garantizando equidad en el acceso a puestos claves.
Beneficios concretos y cultura inclusiva
Las políticas de D&I en Accenture generan una cadena de valor que no solo impacta a sus empleados, sino también a clientes, proveedores y comunidades en el entorno de cada filial:
- Desde la perspectiva interna, la diversidad impulsa equipos creativos y resilientes, lo cual se traduce en una mayor capacidad de innovación y resolución de problemas.
- El sentido de pertenencia reduce la rotación y aumenta el engagement, generando ahorros operativos y fortaleciendo la reputación empleadora a nivel global.
- Las alianzas con organismos como el Foro Económico Mundial y ONGs permiten que las experiencias de Accenture en inclusión sean difundidas y replicadas en otras compañías y sectores.
- A nivel comunitario, el voluntariado corporativo prioriza proyectos de capacitación para jóvenes de grupos vulnerables, mujeres STEM, y migrantes, utilizando la tecnología como herramienta de inclusión social.
Mecanismos de monitoreo y transparencia
Accenture tiene un método bien organizado para fomentar la diversidad e inclusión, el cual está apoyado por sólidos mecanismos de monitoreo:
- Publicación anual del reporte “Inclusion & Diversity”, donde se detallan resultados, progresos y áreas de oportunidad.
- Encuestas periódicas para empleados sobre percepción de inclusión, adaptando planes de acción según sus comentarios.
- Análisis de datos demográficos, brechas salariales y representación en mandos medios y altos.
- Vinculación con indicadores externos como los Índices Bloomberg de Igualdad de Género y Human Rights Campaign, que ofrecen comparativos internacionales.
Retos actuales y futuros caminos
A pesar de los logros, Accenture identifica desafíos continuos:
- El combate a los prejuicios inconscientes que existen en todos los niveles de la organización, abordado mediante capacitación obligatoria y revisión continua de los procesos de selección y desarrollo.
- La integración de nuevas identidades culturales y tecnológicas en áreas donde las leyes locales podrían entrar en contradicción con los estándares globales.
- La permanencia de los cambios culturales, garantizando que la inclusión no dependa únicamente de iniciativas aisladas, sino que se incorpore en los objetivos empresariales.
La influencia transformadora
La experiencia de Accenture demuestra que la diversidad y la inclusión, al integrarse en la responsabilidad social empresarial, se transforman en un motor significativo de cambio. Este método supera el simple cumplimiento de regulaciones y se establece como una constante fuente de innovación, credibilidad y sostenibilidad en la empresa. Promover el respeto, la autenticidad y la equidad a todos los niveles no solo impulsa el desarrollo completo de su personal, sino que también motiva a líderes del sector a replantear el propósito y el impacto social de las organizaciones en el siglo XXI.