La denuncia señala que el funcionario cuando se presentó en el restaurante, «lo hace de una manera que no se ajusta a ningún procedimiento habitual».
El empresario Ghassan Almaaz, dueño del restaurante La Fragata, solicita provisionalmente una indemnización económica de 50 mil dólares, por los daños ocasionados.
Los imputados son el representante de Bella Vista, Ricardo Domínguez y Christian Joseph Viera.
La denuncia penal, presentada el pasado mes de mayo, es por la presunta usurpación de funciones públicas y abuso de autoridad.
En la noche de enero, el señor Vieria se presentó en el local comercial La Fragata, según la denuncia, «de manera secreta y realizando grabaciones, que según él indicó eran parte de sus funciones como inspector del Municipio de Panamá.»
La denuncia señala que Vieria cuando se presentó en el restaurante La Fragata «lo hace de una manera que no se ajusta a ningún procedimiento regular de las autoridades del Ministerio de Salud o de la Municipalidad de Panamá».
Vieria dejó debajo de la puerta del restaurante el boleto de citación de la Municipalidad de Panamá, dirección de Justicia, departamento de inspección legal. La citación se fijó para febrero, y como se indica en la denuncia, el dueño de La Fragata se presentó en el Municipio de Panamá para cumplir con la citación y se le informó que no tenía citación y que Vieria no es funcionario del Municipio de Panamá. . .
Por ello, según el empresario, nos encontramos “ante la clara presencia de órdenes que tienen como finalidad perjudicar a las empresas sin tener una justificación lógica o legal para las mismas, por lo que solo puede encontrar una explicación en que dichas acciones tienen intereses personales, ya que el El señor Ricardo Domínguez, en su calidad de representante del distrito de Bella Vista, no está autorizado por ley para ordenar este tipo de trámites ”.
Según el empresario, Vieria tenía que estar acompañada por al menos un oficial de cumplimiento, es decir, un inspector municipal, lo cual no sucedió, porque el señor Vieria estaba solo, sin la compañía de ningún otro funcionario o autoridad competente, solo manteniéndose a sí mismo. ante los oficiales. en el hecho de que el señor Ricardo Domínguez le ordenó practicar la diligencia.
El dueño de La Fragata presentó como prueba la certificación del Municipio de Panamá, del departamento de Recursos Humanos, donde acredita que Vieria no es funcionario de la Alcaldía de Panamá. Además, imágenes de Twitter donde el representante Domínguez felicita y apoya la labor del funcionario, lo que demuestra que apoya la práctica de este tipo de diligencias.
También la certificación de la Municipalidad de Panamá, dirección de Legal y Justicia, donde indican que no ordenaron realizar ningún operativo para esa fecha en Bella Vista.
Vieria publicó, en agosto en Twitter, que es el jefe de Atención Ciudadana de la Junta Comunitaria de Bella Vista, y desde octubre de 2019 fue delegado las funciones de Inspector Legal en el distrito de Bella Vista. Agregó que el 22 de octubre de 2019 se emitió la Resolución No. 63, que resuelve delegar funciones como inspector legal, con el deber de cumplir con las instrucciones y normas establecidas, nuevamente, por Legal y Justicia. Adicionalmente, escribió que el 24 de mayo de este año, tras lo ocurrido en La Fragata y en medio de la disputa judicial, el director de Jurídico y Justicia solicitó la devolución de las taquillas.