Afectado por la pandemia del covid-19, el PIB de Argentina cayó un 9,9% en 2020
El ministro de Economía de Argentina, Martín Guzmán, dijo este jueves que el país sudamericano está «viviendo un sólido proceso de recuperación económica» y que actualizó la proyección de crecimiento del producto interno bruto (PIB) para este año al 8%.
En la conferencia virtual de la XVIII edición del Consejo de las Américas, Guzmán indicó que la recuperación tiene «características heterogéneas», pero «con una clara proyección de crecimiento vigoroso» para 2021.
Afectado por la pandemia del covid-19, el PIB de Argentina cayó un 9,9% en 2020, profundizando la recesión que comenzó en 2018.
Para el 2021, el Gobierno de Alberto Fernández había proyectado en el Presupuesto para este año una recuperación económica del 5,5%, que posteriormente sus funcionarios actualizaron al 7%.
Guzmán agregó este jueves que en el primer trimestre se observa un crecimiento de la inversión de 38,4% interanual en términos reales, así como en el frente externo al señalar el aumento de las reservas internacionales y las exportaciones.
DEUDA CON EL FMI
Argentina sigue “solucionando los problemas de las deudas insostenibles”, agregó Guzmán, luego de que el país reestructuró su deuda con acreedores privados en 2020, bajo el principio de que “hay responsabilidades compartidas entre acreedores y deudores y con esa lógica esas deben resolverse. problemas».
El gobierno de Fernández tiene abiertas, desde el año pasado, negociaciones con el FMI para refinanciar deudas por 45.520 millones de dólares contraídas en un pacto de ayudas financieras firmado en 2018, durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
“Entendiendo que hubo una corresponsabilidad en lo que fue el historial de endeudamiento con el FMI es que se busca solucionar este problema, a partir de una negociación que dé lugar a condiciones que Argentina pueda sostener”, dijo el ministro en este foro de el que participaron otros miembros del Gobierno argentino, así como líderes políticos de la oposición.
El Ejecutivo argentino pretende llegar a un acuerdo sobre facilidades ampliadas con el FMI, con menores tasas de interés y plazos de pago de al menos 10 años.
LIMITACIONES
El presidente del Banco Central, Miguel Pesce, agregó que el país está trabajando «intensamente» con el FMI «para buscar un mecanismo de acuerdo» sobre vencimientos de deuda «especialmente» para los próximos dos años.
«Esperamos poder llegar a un acuerdo aceptable para Argentina y también entender las limitaciones de la carta constitutiva del FMI para abordar situaciones como la presentada a Argentina, que es el mayor deudor del organismo», dijo Pesce.
Respecto a las restricciones de acceso al mercado cambiario, Pesce indicó: “En la medida que podamos exportar más, que este impulso exportador continúe, seguramente continuaremos reduciendo nuestras restricciones cambiarias para llegar a algún punto, ojalá lo antes posible, no tener que necesitar este tipo de controles ”.
INVERSIONES
Por su parte, el canciller argentino, Felipe Solá, recordó que Argentina necesita inversiones productivas y que Estados Unidos es el primer inversor.
«Vemos a Estados Unidos como un aliado muy importante en la recuperación económica de Argentina», dijo Solá.
El canciller explicó que los objetivos de su cartera son promover el ingreso de genuinas divisas a través de las exportaciones, emprender un camino de integración social, productiva y comercial y de diálogo político con toda la región, centrado en la pertenencia de Argentina al Mercosur. y en el Celac.
EL PAPEL DE LA OPOSICIÓN
La conferencia, organizada por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) junto con la Americas Society / Council of the Americas, también contó con la presencia de candidatos de la oposición y del partido gobernante para las elecciones primarias del próximo mes de septiembre para el legislativo que se celebrará en noviembre.
Uno de los líderes de la oposición fue el alcalde de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, quien recordó que Argentina «sigue enfrentando las mismas frustraciones que hace 50 años», en cuanto a inflación, deterioro económico y educativo, cambio permanente en el reglas del juego, ausencia de federalismo y luchas constantes entre actores políticos.
«Para salir adelante, Argentina necesita tener un plan serio y de largo plazo acordado por todas o la mayoría de las fuerzas políticas de una vez por todas», dijo, señalando que este plan se basa en los pilares de la educación, el trabajo, la Estado inteligente y facilitador y respeto a las instituciones y rechazo de privilegios.