El hacinamiento carcelario asciende a 4.351 personas privadas de libertad;  la situación es crítica por dentro

Janaina Tewaney Mencomo, ministra de Gobierno asegura que están buscando estrategias que les permitan enfrentar el hacinamiento carcelario. Un problema que afecta principalmente a las provincias centrales y Colón.

Janaina Tewaney Mencomo, responsable de Mingob durante la mesa editorial de GESE.Erick Marciscano | La estrella de Panamá

Hasta agosto pasado, las cárceles del país albergaban una población de 18.942 personas privadas de libertad, lo que representa una sobrepoblación de 4.351 personas o el 30%, ya que la capacidad instalada es de 14.591 internos.

Ante el elevado número de personas que se encuentran recluidas en las cárceles, la titular del Ministerio de Gobierno (Mingob), Janaina Tewaney Mencomo, anunció que están trabajando en una serie de soluciones rápidas, debido a que se superaron las capacidades en el centros penitenciarios.

El punto de vista de Tewaney Mencomo se conoció luego de su reunión con el consejo editorial de Grupo El Siglo & La Estrella (GESE), quien brindó un breve informe sobre las diversas responsabilidades de la institución a su cargo.

Si bien Tewaney Mencomo señaló que en el complejo La Joya, La Joyita y La Nueva Joya concentran el mayor número de internos en hacinamiento, es en las provincias centrales y Colón donde se concentra el mayor número de complejidades para la resocialización, debido a la falta de de espacio, ya que estos se encuentran en la cabecera y junto a entidades de seguridad como jefaturas de la Policía Nacional o gobernaciones.

En la cárcel de Santiago, provincia de Veraguas, cuya capacidad es de 150 internos, la Dirección General del Sistema Penitenciario mantiene una población de 584 personas; en las cárceles de Aguadulce, Penonomé y Llano Marín, en la provincia de Coclé tienen capacidad para 310 internos, pero su población es de 830 personas privadas de libertad.

Se replica la situación en el penal de Chitré, provincia de Herrera. La cárcel tiene capacidad para detener a 80 personas, pero tiene 340 personas privadas de libertad; mientras que en Las Tablas, provincia de Los Santos, la capacidad es para 75 personas privadas de libertad, cuando albergan un total de 252 personas.

Los programas de resocialización se encuentran dentro del sector educación, confección de vestidos textiles, vestidos típicos y artesanías, entre otros como la agricultura.

Refiriéndose al Centro de Rehabilitación de Mujeres Cecilia Orillac de Chiari (Cefere), la jefa del Mingob, dijo que en este centro la infraestructura se ha visto afectada por el paso del tiempo y reconoció que también se mantuvo pequeña «, lo que ha impedido que las mujeres privadas de la libertad en medio de la pandemia tienen el espacio para los programas de resocialización ”, dijo.

“Hoy hemos demostrado con números que a través de la educación, los talleres de manejo de la ira, la dependencia de sustancias y los temas de productividad, como la agricultura”, la gente puede resocializarse, dijo el titular de Mingob.

Para 2022, Tewaney Mencomo espera un aumento en la cantidad de personas que buscan la resocialización como una forma de satisfacer a la sociedad. Para el próximo año tendrán gallinas, vacas, además de apicultura. “Además de educación, les damos trabajo. Ya en 2021 logramos la cuota, ahora queremos lograr en 2022 que la cifra crezca un 20%”, dijo.

Quejas de Cefere

Debido a una serie de irregularidades en 2020, un grupo de particulares de la Cefere alertó a la Defensoría del Pueblo y presentaron sus respectivas denuncias. Ante el interrogatorio, Tewaney Mencomo indicó que estas denuncias han sido atendidas e investigadas, además de los temas de reparación y mantenimiento del sistema de agua potable y alcantarillado, para que puedan estar en un lugar más adecuado.