En este sentido, Donald Murphy, vocero del BOP, dijo a Efe que el Negociado «no brinda información adicional sobre los internos que no se encuentran bajo la custodia del BOP».
El narcotraficante mexicano Eduardo Arellano Félix, exjefe del cartel de Tijuana, fue liberado este miércoles de una prisión federal en Pensilvania donde cumplía una condena de 15 años por cargos de lavado de activos y conspiración para utilizar ganancias ilícitas en Estados Unidos.
El Negociado Federal de Prisiones (BOP) confirmó hoy a Efe que Arellano Félix, conocido como «el Doctor», ya no está bajo su custodia.
Aunque había sido condenado a 15 años de prisión, el mexicano de 64 años no cumplió su sentencia como resultado de su amplia cooperación con las autoridades estadounidenses, que comenzó en mayo de 2013 cuando se declaró culpable.
Parte del acuerdo con el gobierno para aceptar su culpabilidad incluía que fuera condenado por solo dos de los siete cargos que se le imputaron cuando fue extraditado de México en agosto de 2012.
Arellano Felix estaba en una prisión federal de baja seguridad en Allentown, Pensilvania, según datos de la BOP. La página de información sobre el capo se actualizará al final de la jornada, explicó la agencia a Efe.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, había anticipado el martes que el narcotraficante no sería deportado a México luego de cambiar su «estatus» y posiblemente convertirse en un «testigo protegido».
«La información que tenemos es que se cambió su estatus», dijo el secretario de Relaciones Exteriores en conferencia de prensa.
Ebrard explicó que Estados Unidos «no tiene la obligación» de explicar el motivo de un cambio en la condición de un detenido, aunque lo más probable es que «la condición del testigo haya cambiado».
«Pero sí cambiaron el estatus, y eso significa que no será deportado a México el miércoles», dijo.
En este sentido, Donald Murphy, vocero del BOP, dijo a Efe que el Negociado «no brinda información adicional sobre los internos que no se encuentran bajo la custodia del BOP».
El cartel de los hermanos Arellano Félix monopolizó las rutas del narcotráfico durante más de 20 años a través de Tijuana, en el noroeste de México.