El líder del PP no oculta su optimismo a seis días de acabar la campaña y habla de forma velada de la posibilidad de alcanzar la mayoría absoluta
«No nos pongamos límites», el dado a los suyos en mitin de Logroño acompañado de Cuca Gamarra
Tras una parada en Vitoria, Alberto Núñez Feijóo llegó a La Rioja cuando quedan seis días de campaña. Una de las comunidades en las que el PP impulsó la mayoría absoluta el 28M y cuya candidatura al Congreso encabeza Cuca Gamarra, secretaria general. El líder del PP, en un optimismo que cada vez el resultado más difícil de ocultar, aseguró que si llega a la Moncloa «creo que pueden cambiar la historia de nuestro país». «Lo digo sin vanidad, pero creo que es el momento», repitió.
El líder conservador aseguró que «la cuenta atrás ha comenzado” y que el domingo de la semana que viene podría «dejar atrás el peor Gobierno de la democracia». Aunque la idea es pedir a los suyos que no se relajen, Feijóo aseguró que “la respuesta en la calle es buena y creo que no tenemos por qué marcarnos límites«. Incluso deslizó la idea de una mayoría absoluta al hablar del presidente riojano, elegido hace apenas unas semanas: «Ahora mismo te saco tres mayorías absolutas. Vas por el buen camino, pero el día 24 de julio [el día después de las generales] Espero volver a sacarte cuatro».
En esta misma línea, lanzó reproches hacia “aquellos partidos” (miraba, con claridad, al PSOE, pero también a Vox, a quien pretendía meter presión) que “insisten en la política de bloques suyos los que no dudarán en bloquear la gobernabilidad de nuevo país». Así, en la estrategia de voto útil puesta en marcha hace semanas, mirando a los electores de Santiago Abascal y al centro izquierda que ve difícil la victoria de Pedro Sánchez y ya que solo busca evitar que la extrema derecha llegue a la Moncloa, busque: “Es difícil, pero no imposible”.
El todavía líder de la oposición insistió en la idea de que el PP necesita “20 escaños para conseguir un Gobierno estable y en solitario” y volvió a reiterar que eso solo conseguirá “concentrando el voto e impidiendo la dispersión”. Como publica este periódico, la semana que falta de campaña es la «decisiva» para Génova y, como ocurrió en Andalucía, cuentan con sumar los diez escaños finales de circunscripciones clave.
El mitin de Logroño tuvo relevancia porque el número 1 al Congreso es Gamarra. El discurso de la secretaria general fue dirigido en todo momento a aglutinar el voto útil en una comunidad que reparte 4 escaños. En este momento, los cálculos de los populares apuntan a que dos los obtendrían ellos y los otros dos el PSOE. Lo que realmente persiguen a los conservadores es arrebatar un tercer diputado, para lo que necesitan comerse la mayor parte del voto de Vox y ganar distancia con los socialistas.
“Ganar aquí es tener un 3-1”, repitió Gamarra, igual que el presidente autonómico, Gonzalo Capellán, que obtuvo la mayoría absoluta el 28M. «Pido movilizar a todos que quieran cambiar y me dirijo a los indecisos. Los que votaron a Ciudadanos y creen que se han quedado huérfanos. Les digo que no lo están. Y a los de Vox, si nuestros dividimos gana Sánchez. El pido que lo piensen bien”, insistió el número dos del PP. Feijóo apuntó después del mensaje: “Sacar 2-2 es empatar. Hay que ir a por el 3-1”, metiendo presión a los suyos.
Igual que el líder conservador en los últimos días, Gamarra también retomó la crítica a la gestión del voto a distancia por parte de Correos. El PP está haciendo un esfuerzo por coche a distancia con el discurso del “pucherazo” que sí provocó Isabel Díaz Ayuso en las últimas elecciones.
El secretario general pidió a Sánchez “no enfadarse tanto” por “pedir que se amplíen los horarios en las oficinas, que haya más carteros y garantizar que los 2,5 millones de votos lleguen a las urnas”. La empresa pública ha insistido en estos días en que están en condiciones de garantizar que todos los solicitantes tendrán su kit electoral a tiempo y que se entregarán los votos, pero el PP no está dispuesto a rebajar el nivel de ataque en ese sentido.