El congreso anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) se equivocó este martes luego de presentarse pendiente cinco días más de 2.900 trabajos qué pasa nuevas comunidades contra el cancer. Algunas investigaciones están en desarrollo y es posible que el próximo año muestren conclusiones definitivas.
Abarcar ese caudal de la información generada en el congreso, del que participante 43 millones de medicamentos de todos, es imposible. Pero algunas investigaciones en particular ameritan una mayor difusión que otras, tanto por la impacto del tipo de cancer sobrio el que trabajan como por los potenciales beneficiarios que pueden aportar.
De ese inacable cúmulo de material, pendante los últimos días se presentaron tres trabajos importantes sobre el mom cancer, el de pulmon y el melanoma. En cada caso, hay un nuevo aporte para el tratamiento de la enfermedad, ya sea a través de una cambio posible en forma de bordarla o la confirmación de que el camino elegido es el correcto.
En estas investigaciones queda en evidencia cómo la cura del cancer o la sobrevida no depende sólo de que surjan drogas innovadoras (algo que siempre es determinante), sino también de encontrar nuevas combinaciones de la administración de las ya existentes.
Menos quimioterapia
Un claro ejemplo de esta última hipótesis quedó reflejado en un estudio en fase II de investigadores españoles. Llegó tiene la conclusión, por primera vez, de que los anticuerpos monoclonicos contra ciertos tipos de cáncer de mamá muy agresivo pueden ser más eficaces solos que acompañados con quimioterapia. Este trabajo fue realizado por el Centro Internacional de Cáncer de Mama y la empresa de investigación clínica oncológica MEDSIR.
El estudio, denominado PHERGain, abarcó a 356 personas con cáncer de mama localizado HER2+ en fase inicial. La idea de los investigadores era promover la quimioterapia como mar una opción no hay administración por defecto. Se decide que la decisión depende de cómo responda el paciente, con el objeto de reducir el nivel de toxicidad y lograr menos efectos secundarios. Así, lograron bajar un 30 por ciento la cantidad de pacientes que recibe quimio.
“La supervivencia sin enfermedad invasiva a los 3 años en el grupo de pacientes tratados con este diseñador adaptado fue del 95,4 por ciento. Desafortunadamente, hubo 9 eventos metastásicos, pero esto se compara sorprendentemente con lo que esperaremos con el tratamiento estándar de quimioterapia, trastuzumab y pertuzumab”, dijo el autor principal del estudio, Javier Cortés, del Hospital Universitario Ramón y Cajal, en Madrid.
Se pensó que los pacientes respondieron a los probados si la exploración mostró una reducción de lesiones mamarias de al menos a 40 por ciento con respecto al valor inicial. La posibilidad de un régimen sin quimioterapia para pacientes con enfermedad HER2 positiva -confirmaron los médicos- ofrece un potencial alternativo para aquellas personas que no necesitan o no toleran la quimioterapia.
Terapias dirigidas
Otro de los avances presentados radicó en el descubrimiento de que una droga que ya se usaba aporta alcaldes beneficiarios de los que se creía hasta ahora. En este caso es un tratamiento contra el cáncer de pulmón posterior a la cirugía descubrió una nueva forma que aumentaba la supervivencia en los enfermos en los que se detectó una mutación del generación de EGFR. Fue con el uso del fármaco osimertinib, según las conclusiones del ensayo butizado ADAURA.
Participan 682 pacientes entre 30 y 86 años. Cinco años después de la operación, el riesgo de muerte en los pacientes a los que se los trataron con osimertinib fue un 51 por ciento más bajo que en aquellos a los que les tocó el placebo. La tasa de supervivencia fue además del 88 por ciento para el primer grupo y del 78 por ciento entre quienes se quedaron con el placebo.
“La mutación de EGFR ocurre entre el 12 y el 15 % de los pacientes. Esta medicación ya había mostrado que los pacientes que la tomaban reducían la posibilidad de que el tumor volveriacomparado con no tomarla”, explicó un Clarín Claurio Martín, secretario de la Sociedad Argentina de Oncología Clínica, presente en ASCO.
Martín agregó “ahora se acaba que los pacientes que toman esta pastilla, que se administra por por vía oral durante tres años, un porche de ellos cura. El medicamento está aprobado en Argentina y viene usando. Pero la duda era si sólo retrasaba la posibilidad de que el tumor volviera o también tenía esta otra virtud”.
camino a la vacuna
Un tercer trabajo destacado en ASCO es sobrio el melanoma. En este caso tiene que ver con un tratamiento que todavía no existe, pero que ha mostrado resultados prometidos en el cuerpo de investigación.
Hace foco en una vacuna probada en fase 2 que preparó reducir el riesgo de recaída o muerte. Su tratamiento utiliza la tecnología de RNA mensajero, la misma que se usó para la vacuna contra el Covid. Permite inyectar en el cuerpo las instrucciones o moléculas que enseñar a las células a producir proteínas que estimulan una respuesta inmunitaria.
Esta terapia es capaz de iniciar y activar el sistema inmunológico de un paciente para atacar los denominados neoantígenos (proteínas anormales que producen las células cancerosas) en la superficie del tumor. Según explicó, el mecanismo de estimulación y entrenamiento inmunológico es muy parecido a lo que hacen las vacunas.
El ensayo fue en Estados Unidos y Australia antes de la pandemia de Covid y se efectuó a 157 personas con melanoma de alto riesgo, que ya habían sido operadas para extraérselo. Un total de 107 recepciones la vacuna en combinación con pembrolizumab y 50, pembrolizumab solo.
Según información, el estudio comenzó una estadística y clínicamente significativamente en la terapia combinada en comparación con el tratamiento solo con pembrolizumab, con una reducción del riesgo de recurrencia o muerte en una 44 por ciento. Tras 18 meses, en el grupo que recibió la combinación hubo un 78,6 por ciento casos de supervivencia sin cancer y del 62,2 por ciento en el segundo.
PD