«Es imposible vivir así», dicen los vecinos, que aseguran que la aparición de los insectos se debe a la pérdida de control de los gallineros de las tejas.
En una situación alarmante que afectó a los barrios de La Plata, los vecinos enfrentan una invasión masiva de moscas que generará un verdadero drama. El problema se repite ya desde hace varios días pero, ante la falta de respuesta de las autoridades, la situación empeoró: los insectos entrar a las casas y hasta dejar huevos en las comidas.
En City Bell, el distrito de Los Porteños se ve particularmente afectado por la plaga de moscas. Un vecino denunció que, aunque sin poder confirmarlo, cree que la presencia de un gallinero cercana es la causa de la invasión. Según su testimonio, la cantidad de insectos es tan abrumadora que las personas no pueden abrir puertas ni ventanas, y su comida se llena de huevos de moscas.
El hombre dijo la necesidad de controlar los gallineros ubicados en áreas urbanas, ya que, según afirma, las moscas se reproducen a partir de la materia fecal de las gallinas.
Mientras tanto, en El Peligro, un barrio privado ubicado en el kilómetro 46 de la Ruta 2, también se vive una situación angustiante. Allí los vecinos compartieron imágenes impactantes de la plaga de moscas que afecta a sus hogares ya la convivencia en el lugar.
Ellos, tal como informó el diario el día, también apuntan a la falta de control sobre los criadores de aves y productores de huevos en la zona como posible origen del problema. Los residentes piden desesperados a las autoridades que trabajan para solucionar el problema y solicitan éficaces medidas.
Los platenses ya sufrieron una molesta invasión de «cotorritas»
En febrero de 2019, la ciudad de La Plata fue violentada por «cotorritas». Esos insectos molestos, algo torpes, que aparecen a kilómetros de distancia, se convertirán en un dolor de cabeza para los vecinos de la ciudad de las diagonales.
Las altas temperaturas que azotaron la zona durante aquellos días finales la llegada masiva de esos insectos que resultaron molestos por sus picaduras que, aunque inocuas y pasajeras, fueron muy punzantes.
Tal como conto Clarín, era dificil combatirlas: no habia repelente que las espante. Era cuestión de aguantar. O prevención. Los expertos recomiendan mantener las ventanas y aberturas cerradas o colocar mosquiteros. Is that sunset se empezaban a concentrar sobre los espacios lumínicos y allí comenzaba el incordio.
En los estudios que realizaron de la UNLP en el ámbito agropecuario se determina que isos insectos son vectores del virus conocido como “Mal de Rio Cuarto del maíz” y del patógeno productor de “Achaparramiento del maíz”. Se discuten al reverso las infecciones patógenas más importantes de esta oleaginosa, incluyendo sus causas por este tipo de insectos.
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