El primer «pueblo» en la historia de los Juegos Olímpicos, con sus cabañas de madera, había electricidad, garantía de cierta modernidad para recibir a los atletas de la edición de 1924, ya de paso por París y sus alrededores. Un siglo después, los organizadores de los Juegos de 2024 prometen desempeñar el papel de“acelerador para la transición energética de Francia”. El evento debe permitir electrificar los usos, dejando de lado los combustibles fósiles.
Todos los sitios serán eléctricamente aprobados. «100%» renovable, según la promesa de París 2024. La organización tiene la intención de centrarse en la energía eólica y solar, en conjunto con los productores en territorio francés. Pero el viento y el sol, intermitentes por naturaleza, a veces se pierden. Por lo tanto, también será necesario abastecerse por otras vías.
O, en el mercado mayorista, el origen de la energía es imposible de establecer. La única certeza: la energía nuclear sigue dominando la producción eléctrica francesa (casi el 63 % en 2022), muy por delante de la hidráulica (11 %), el gas fósil (casi el 10 %), luego la eólica (8,5 %) y la solar (4 %).
El Comité Organizador de los Juegos ha encontrado una solución: utilizará el sistema de «garantías de origen», válido en toda la Unión Europea. Este estándar compensa cada megavatio-hora consumido por compras de electricidad renovable suministrada en otra parte de la red.
No sin paradoja, la organización primero consideró asociarse con TotalEnergies. Ante el escepticismo de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, era necesario renunciar a la multinacional del petróleo y el gas, aunque empieza a invertir en renovables. este 33mi edición de los Juegos de Verano contará por fin con el grupo EDF para «socio premium»tras un acuerdo formalizado en noviembre de 2019.
Segunda paradoja: para respetar la promesa inicial de los organizadores en torno a la energía eólica y solar, el electricista deberá alejarse de todo su parque nuclear, sin embargo, la principal fuente baja en carbono del país.
Durante el concurso, la empresa también tendrá el estatus de «proveedor oficial» gas. Esto será, en principio, “biogás para usos residuales”asegura Frédéric Lebrun, subdirector de energía para París 2024. Por ejemplo, para el agua caliente sanitaria del centro de distribución internacional, en Le Bourget (Seine-Saint-Denis).
No más diésel
Para la flota oficial, el patrocinador japonés Toyota habla de una «enfoque multitecnología»sin especificar la cuota de «vehículos eléctricos» y el de «híbridos» recargar.
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