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El base de los Grizzlies, de vuelta a las canchas tras una sanción de ocho partidos y el ingreso en un centro de Florida. «Eso no significa que esté completamente bien», admite

Morant, durante el partido de su retorno ante los Rockets.JUSTIN FORDGetty Images vía AFP

Las drogas, el alcohol, los excesos y la NBA. En el mismo origen de la mejor liga del mundo de baloncesto se amontonan a puados los ejemplos de carreras arruinadas, de talentos perdidos para la causa. De la tragedia de sesgo de Len en caso de Lamar Odom. Esos fantasmas que intentan cortar de raz David popa in su da vuelven ahora a sobrevolar al chico de moda, al genio incontrolable de las rastas de colores. Tan asombrosas las aventuras de ja morant dentro de la cancha como los recientes acontecimientos que le han asomado al abismo: el pasado mircoles regres a las canchas tras nueve partidos de ‘reflexin’ por sus escándalos.

Lo que resultóron tiene cual más grotesco. El timo, el que obliga a los Grizzlies a mantenerlo apartado del entorno deportivo, mostrar en su mano izquierda un arma de fuego en un directo de su cuenta de Instagram, con más de ocho millones de seguidores. Ocurri en Colorado, horas despues de perder un partido contra los Nuggets y el incidente ocurrio en un club de una conocida zona nocturna. Tambin se le ve en una habitacin llena de billetes junto a una bailarina de striptease sentada en sus piernas. «Me hago responsable de mis actos, pido perdn a mi familia, compaeros, entrenador, aficionados ya la ciudad de Memphis. Buscar ayuda», admiti.

Era la gota que colmaba el vaso de la polémica del genial base de los Grizzlies, quien a sus 23 años, con su juego impredecible, directo y enrgico estaba resultando toda una revolución. La NBA, cuyo régimen interno en este sentido es severo, le sanciona con ocho partidos (sin jugar y sin salario) por «conducta perjudicial para la Liga». La reflexin de Morant y su equipo la extensioni a uno ms, como queriendo squid las aguas antes de los inminentes playoffs. En este periodo, no 11 das en un centro de asesoramiento de Florida, trabajando con psicolgico y realizando tcnicas de reiki y de respiracin para controlar la ansiedad, tratando de calamar su yo interior. “Eso no significa que esté completamente bien.

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Un niño, con un cartel de apoyo a Morant.JUSTIN FORDGetty Images vía AFP

Porque no era la primera vez que el chico, rookie del ao en 2020 y padre de una nia, se meta en un lo. El pasado mes de julio, semanas después de que Morant firmó un contrato de cinco años con los Grizzlies por más de 231 millones de dólares, el director de un centro comercial de Memphis denunció amenazas y agresiones del jugador y su grupo de amigos tras una discusión con Jaime, mi madre. Desde entonces, ya ha visto una pistola durante un incidente en un partido amistoso en una mansión en Tennessee. Ver informar el poste de washingtonuno de los jugadores no profesionales de la pachanga le denuncia por golpearle de forma violenta en varias ocasiones.

Incluso, ms rocambolesco todava, el pasado mes de enero los Pacers denunciaron que su autobs fue apuntado por un lser de un arma de fuego desde una furgoneta en la que iba Morant tras su partido en Memphis. Uno de sus amigos, Pack Devontefue sancionado pendiente un ao sin poder asistir a partidos de los Grizzlies por varios altercados.

Todo demasiado polémico en la figura de uno de los nuevos iconos de la Liga, rey de los puntos fuertesque hasta su sanción promediaba más de 27 puntos, seis rebotes y ocho asistencias en los poderosos Grizzlies de Santi Aldama. Porque aunque l lo niegue, pida perdn y abandone las redes sociales, su supuesta adiccin al alcohol parece estar detrs de la derivada de aquel chico que pas bajo el radar de todos los ojeadores y slo uno, de la Universidad de Murray State, cuando se cayó un descanso y salió a por algo de picar (una bolsa de Doritos), le descubrió en una pista secundaria.

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