“Un Estado del tamaño de Panamá tiene que promover el trabajo en empresas privadas […]»
En Panamá hay problemas que deben solucionarse de raíz. Se trata de cuestiones de cómo gastamos los Presupuestos Generales del Estado, porque no es ni el más eficiente ni el más inteligente. Por ejemplo, se debe reducir el número de empleados públicos. Un estado del tamaño de Panamá tiene que impulsar el trabajo en empresas privadas, porque al seguir bajo la fórmula de hace cinco años de crear empleo, por cuota política, en el ámbito estatal, lo que hacemos es pegarnos un tiro. Esos millones de dólares que pagamos en nómina bien podrían ir a apalancar el sistema de justicia, para que se designen más jueces y fiscales para atender diligentemente los casos que se presenten. Esos millones se pueden utilizar para reparar y construir escuelas o para construir carreteras muy necesarias en el interior del país. Tampoco es que tengas que iniciar una caza de brujas y rebotar para rebotar. Es necesario hacer un plan lógico para reducir la nómina estatal y al mismo tiempo que la empresa privada comience a generar empleos. Lo mismo ocurre con un gran número de trabajadores de la Caja de Seguridad Social. El nivel de personal administrativo designado por cuotas políticas no tiene sentido. Son temas prioritarios a arreglar en el Gobierno y hay que empezar ahora, estableciendo un plan bien estructurado para, por un lado, bajar la nómina estatal y, por otro, promover el empleo en las empresas privadas. Dejar cosas así no es una opción. ¡Simple como eso!