El presidente de Rusia, Vladimir Poutinedesarrollado al término de la amplia expectativa respuesta de su país al precio para el petróleo decretado por Occidente, firmando un decreto que prohíbe la exportación de crudo y sus derivados a aquellos países que apliquen dicho límite, durante cinco meses de ahí a salir del proximo 1 de febrero.
El G-7el Unión Europea allí Australia pactaron imponer al petróleo ruso transportado por mar un precio máximo de 60 dólares por barril del 5 de diciembre Como represalia se conoció la «operación militar especial» en Ucrania. Dicha cifra rounda el precio actual por el que se vende el crudo del Kremlin, pero queda muy por debajo del precio inesperado por el que Rusia pudo vender su petróleo colgante este año y gracias al cual pudo contrarrestar en un inicio el impacto de las sanciones financieras decretadas contra Moscú.
Segundo alcalde exportador
Rusia es el segundo mayor exportador mundial de crudo harto de Arabia Sauditay una caída importante en sus ventas tendrá unas consecuencias de la orden mayor para el suministros mundiales de esta fuente de energía. El decreto, difundido en la página web del Kremlin y en una web del Gobierno, ha sido presentado como «una respuesta directa» a las acciones que son inamistosas y son contrarias al Derecho Internacional llevadas a cabo por EE.UU, estados extranjeros y organizaciones internacionales que se han unido a ellos».
«Las entregas de petroleo y derivados del petroleo a entidades extranjeras están prohibidas, en el caso de que en los contratos para estas exportaciones, de forma directa o indirecta, contemplaten el mecanismo para fijar el precio máximo», reza el texto legal. «Esta prohibición establecida se aplica a todas las etapas de la exportación, hasta el consumidor final», continúa. La prohibición sobre la venta de petróleo entrará en vigor 01 de febreroaunque el veto sur la venta derivados del crudo deberá esperar a la decisión del Gobierno ruso y podrá ser efectivo después de dicha fecha.
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El tope al precio del petróleo, una medida no vista ni siquiera en tiempos de la Guerra Fría, está destinado a mermar las arcas estatales rusas y los esfuerzos rusos militares en Ucrania. Los analistas han asegurado que la medida tendra un impacto limitado en los ingresos que Moscú está obteniendo en la actualidad. Pese a ello, el Ministro de Finanzas, Antón SiluanovAdmití que el déficit fiscal podría superarse en 2023 2% pronósticoun obstáculo fiscal añadido para un país que está gastando mucho dinero en su campaña militar en Ucrania.
Con el inicio de la guerra, Moscú ha reorientado sus exportaciones de crudo hacia Asia, pero en concreto hacia China y la India.