La inteligencia artificial continúa sacudiendo el mundo de la tecnología. Google lanzó un chatbot que compite con ChatGPT el martes 21 de marzo. Bard, como se le llama, tiene como objetivo mejorar la calidad de las respuestas de Google mediante el aumento de las interacciones de los usuarios.
La filial del grupo Alphabet había anunciado catastróficamente, a principios de febrero, la creación de Bard, pocos meses después de la llegada en noviembre de ChatGPT, desarrollado por la start-up OpenAI en colaboración con Microsoft.
Su uso se limitó inicialmente a «probadores de confianza», antes de la apertura, el martes, al público en general. Sin embargo, se ha restringido el número de conexiones; y una lista de espera, establecida, para gestionar la demanda. El acceso actualmente solo es posible desde Estados Unidos y Reino Unido.
“Salvaguardas” implementadas para contener los “defectos” de la herramienta
La interfaz es un sitio web, independiente del buscador de Google, con un espacio en el que el usuario puede realizar una consulta por escrito. “Aprendimos mucho al probar Bard, y el próximo gran paso para mejorarlo es recibir comentarios de más personas”Los vicepresidentes de Google, Sissie Hsiao y Eli Collins, escribieron en una publicación en un sitio de Google.
“Cuantas más personas lo usen, mejores modelos de lenguaje grande (LLM, un programa que puede generar respuestas a preguntas solicitadas en lenguaje cotidiano) para predecir respuestas que podrían ser útiles”, explicaron los dos funcionarios. Al recibir datos y conversaciones escritas, el algoritmo LLM puede determinar con mayor precisión la respuesta relevante a una pregunta.
Los dos ejecutivos de Google reconocen que los LLM «no son perfectos»y puede “proporcionar, de manera confiada, información inexacta, engañosa o falsa”. Google afirma que ha implementado «salvaguardias» para contener las posibilidades de respuestas inexactas o inapropiadas, por ejemplo, para limitar la duración de las intervenciones de Bard en un diálogo con un usuario.
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