La publicidad de los supermercados sobre el uso de mano de obra frente a las maquinas nos ofrece muy poca informacion.
En el supermercado de mi barrio hay toda una gama de productos, como guisantes de China o calabazas de Guatemala, cuyas etiquetas anuncian en letras enormes que han sido “recogidos a mano”. Cada vez que paso por ese pasillo, me pongo nervioso cuando
Para seguir leyendo hágase Premium
Pruébelo por 1€ el primer mes
y disfrute de acceso ilimitado a todo el contenido web de Expansión